DESTINO

Hay veces que no aguanto más, el terrible llanto.
Y no sé como hacerle, para no quererte tanto.
Así pasen mil años, el tiempo será corto para recuperarme.

Solo queria un espacio en tu corazón;
para ser tu amigo, novio y amante.
Mi deseo es que seas feliz
y que nunca pises los suelos de un mundo gris.

Tu destino, ahora lo entiendo,
ha sido trazado junto a él.
No me queda más, que pedirle a Dios,
que seas feliz con o sin él.

OSCAR ZARATE